Resistencia...

Por tí con suma dificultad me dije un día que no y me prometí no hacerlo. No sé si la mente y el orgullo de cumplir con mi promesa podrán hoy vencer la otra parte de mi ser que pide a gritos reintentarlo.

Que comience el Show!

La vida es un espectáculo, el mundo es su escenario, y vivirla es definitivamente mejor que ver una película. Mucho más que eso, vivirla no es sólo ver una película es trabajar en una película que dura años y años. Bueno, quizá desde ese punto de vista no se piense tan tentador, pero vivir la vida es arriesgarse, es disfrutar, luchar por lo que uno quiere, contar los ladrillos de una pared, hablar contigo mismo en el espejo, y pensar que Dios es un D.J.

VIVE LA VIDA... OHH OHH... VIVE LA VIDA OHHH.. OHHH...

Hay de todo: caras y caretas, meros y marionetas. Y estamos todos aquí, en este espectáculo que nunca acaba y que renueva periódicamente sus personajes, pero la trama continúa. Personajes de toda clase, toda la variedad, escenas de todo tipo y para todas las edades, el show con más rating de todos los que existieron, existen y existirán. Es un reality en su máxima expresión. Es excelente!!!

Refracción...

Mis ojos sobrepasan las distintas densidades y penetran en tu mundo, en tus ojos. Me miras si te miro... me escondo si te escondes. No sólo son tus ojos, es tu mirada, y no es sólo tu boca, es tu sonrisa; es tu combinación de cualidades que me hacen pensar que eres tan sólo producto de mi más idealizada imaginación.

Eres como soy o soy como eres pero hay algo en nosotros que no se puede obviar, pero aprenderá a poderse. Sólo sé que cuando te miro a mi lado en el espejo, pues de este lado estás al lado de alguien más, me es imposible sobrepasar esa frágil pero significativa muralla de vidrio, la razón que de tí me aleja, y la razón que a tí algún día me acercó.